lunes, 24 de enero de 2011

hoy iba a escribir de una mujer maravillosa, etérea, fugaz... y fue
cuando me descubrí escribiendo sobre mujeres -otra vez- que decidí no
hacerlo, porque me encontré en lugares comunes, repitiendo de algún
modo ritmos de días que no son el de hoy, ha sido por ellas que muchas
veces escribí cuentos, intentos de poemas, fábulas imposibles,
tristes remedos de reclamos al aire... por alguna también que dejé de
hacerlo.
Hoy no sería justo hablar de ésta, una anónima para quien lea, que
ahora reside indefinidamente el apartamento que he acomodado en el
corazón, pues hoy no puedo ser objetivo por más que trate, sus ojos y
la promesa tras ellos no me lo permiten.
En cambio puedo hablar de la catársis que provoca, de la risa
escondida, de la paciencia cultivada amorosamente, los disgustos
inventados o alguna otra razón inocentemente lastimera, pero no,
tendría entonces que hablar de amores, de ésa promesa tan compleja,
de la posibilidad infinita que eso genera...
Y no, con todo y que sea el corazón el que reclame siempre en
situaciones como esta escribir algo, dibujar algo, dejar de algún modo
la huella gráfica de lo sucedido, tenía pues que dedicarme a los
enseres visuales, dejar algún rastro que de testimonio del hecho, hoy
tocan palabras, mañana no se... Pero espero que al corazón no se le
acaben las ganas de comunicarse, no por mucho mucho tiempo.

el amor, vaya cosa compleja.

He escrito.
el gatou rocanrolerou
In Lakech

lunes, 5 de abril de 2010

Hace un par de semanas desde que A. se fue, es difícil cuando estás
forjando algo con alguien, la quiero, mucho, tanto que se que es
importante para ella viajar, conocer el mundo, y mas allá del egoísmo
natural de querer que esté aquí, o la envidia de la buena -suponiendo
que eso exista- de querer estar ahí...
Justo ahora etoy viendo American Splendor, la historia de Harvey
Pekar, su autor que parece tener algún tipo de desorden mental, y que
requiere que su mujer esté con el todo el tiempo... Odio verme
reflejado de algún modo con personajes de ese tipo, y con todo sonrío
y la espero como el esposo abnegado que soy (chuckles), extraño su
sonrisa, extraño debatir con ella temas de actualidad, extraño
platicar con ella, extraño dormir hasta tarde y crudear juntos viendo
una peli, extraño la adrenalina que supone salir con ella a una
fiesta, extraño hablar de libros, sus chistes ácidos, su mente
abierta, comer con ella, abrazarla cuando no es arisca, sorprenderla
con alguna historia, o que ella me sorprenda...
La extraño mucho, yo se, la pienso mucho y la pienso bien.

Pronto debo escribir sobre Colombia, antes de que se me olvide, además
tengo un encargo pendiente al respecto, estoy pensando si es correcto
escribir lo mismo aquí y allá... Apenas lo sepa lo haré... Creo.

El gato rocanrolero con antojo de donas
In Lakech

jueves, 18 de marzo de 2010

Sigo aquí y sigo vivo, hoy me leí en viejos ayeres, cuando reclamo
tener 21, cuando llevo 6 años de experiencia y una vida inmensa a
cuestas... de lo nuevo?
Ahora tengo un trabajo estable, muchos nuevos amigos (MUCHOS), me mudé
a vivir solo con unos cuates, viajé por primera vez del país, fue
lindo pero no increíble, tengo novia a la que tengo que convencer cada
semana de que somos novios o algo, pero la quiero mucho.
Convivo algo conextranjeros y está chido y no, cuando creas lazos
está súper jodido decir adiós, ahora se va una de mis mejores amigas
de últimas y laborales fechas, se vuelve a Portugal y odio la
situación, la vida sigue y aunque no lo parezca sigo escribiendo, sigo
viviendo...

Que un día no les extrañe volverme a leer por acá, si acaso alguien
se acuerda o me extraña o se le ocurre aparecerse en este lugar.


El gato rocanrolero antesdel sueño
In Lakech.

viernes, 5 de marzo de 2010

Well, if I know you (and I like to think I know you... Sort of...), I
know eventually you'll end up here...
You are welcome, this is me...

El gato rocanrolero algo nervioso, creo...
In Lakech

martes, 19 de enero de 2010

cuando quieres a alguien la cosa es así: respiras profundo, cuentas hasta el 5 o hasta el 10 o hasta que haga falta, respiras profundo, le das chance a la paciencia de actuar, al enfado de desenfadarse, escribes un poco, piensas otro tanto, sonríes, te enojas...

al final de todo y de nada te sirve enojarte, o hacer pucheros, o querer cambiar al mundo justo como quieres que sea, que al final seguirá siendo como es, la cosa es verlo de un modo más amable, menos egoísta, con más posibilidades...

hoy la quiero, mañana seguro también, pero lo más importante creo, es que hoy la quiero, y que mientras pueda leer esto, en parte siempre será hoy.

hoy es lo verdaderamente importante.

el gato rocanrolero, que iba a ver Paris Je t'aime pero se da cuenta que es tarde y hay que trabajar mañana...
In Lakech